Jesucristo rey del universo

Hoy celebramos la solemnidad de Jesucristo rey del universo. Al celebrar que Jesús es Rey, debemos entender que no es como los “reyes” de nuestro mundo. No es un rey poderoso, con un gran ejército ni que tiene mano dura. Su reinado viene de otra forma, con otros ingredientes.

Su trono, fue una Cruz donde de ella, quiso salvar a toda la humanidad. Que en este día descubramos que el Rey de Reyes viene para implantar verdad, justicia, amor, perdón y vida plena.

En el texto del evangelio de Lucas 23: 35-53 se nos narra la crucifixión del Señor. Nos paramos en el letrero “Rey de los Judíos”, y en el buen ladrón, que le hace una confesión de fe.

Jesucristo Rey del Universo
Jesucristo Rey del Universo

Vemos a Jesús colgado de un madero que es rechazado y humillado, ellos tenían una imagen de Dios que Jesús no representaba. Jesús para ellos quedó como un “fracaso”.

El problema, no es de Jesús, es de ellos. Ellos esperaban un Rey que les sacara de todos sus problemas. Un Rey que estuviera con la espada en mano, con ejército, que ganara en las batallas… Ellos esperaban a un rey mundano.

No se dan cuenta, que Dios estaba acompañando a Jesús en la Cruz. Dios actúa sin que nosotros le veamos, de una forma silenciosa. Estamos acostumbrados a funcionar en el aquí y el ahora, y Dios no juega igual.

Más reflexiones católicas…

La historia de Jesucristo rey del universo parece un fracaso

La historia parece de fracaso, de final, de derrota, de tristeza y dolor. Está Jesús en una cruz crucificado, olvidado, abandonado, torturado, fue negado y de paso crucificado junto a dos ladrones.

En estas circunstancias, observamos lo inesperado, ahí uno de estos malechores descubre que Jesús es Rey, Dimas le pide a Jesús que lo incluya en su reino.

Es esto lo que celebramos este día, la gran solemnidad de Jesucristo rey del universo.

La gran interrogante es saber cómo un Cristo derrotado, abandonado, torturado, asesinado, se convierte en rey, es la más grande de las paradojas.

¿Cómo un Cristo derrotado y asesinado se convierte en un rey?

Fíjense que tenemos como dos tipos de personas, están por un lado los soldados y está el que es conocido típicamente como buen ladrón.

Los soldados están convencidos que Jesús no puede salvarse ni el mismo: «si fueses Dios bajarías de esa cruz», le retan, no creen en la salvación ni siquiera del mismo, mucho menos en la de ellos.

Por otro lado tenemos a Dimas el buen ladrón, cree en la salvación de el y también la suya, tanto es así que le dice «acuérdate de mi cuando estés en tu reino» es decir, este es el hombre que al final de su vida descubre el reinado de Jesús, cree en la salvación.

Ahí vemos la gran diferencia, Jesús cuando le retan a que se salve, ante aquellos que no creen en la salvación, no les obedece, guarda silencio, no actúa, y ante aquel que sí cree en la salvación, si le obedece, y le responde: «hoy mismo estarás conmigo en el paraíso.»

por otro lado también la diferencia en la actitud de los soldados y la actitud del buen ladrón.

¿Por qué es Jesucristo rey del universo? VÍDEO

¿Porqué a uno le obedeció y a otros no le obedeció.?

La respuesta puede ser la siguiente: Dimas estaba al final de su vida, estaba condenado, humillado, destrozado y así le ruega, el buen ladrón supica a Jesús y le da todo lo que tiene, Por eso Jesús le recibe.

Se presenta con sinceridad y Jesús le abre sus brazos, le abre su reino, ¡es la misericordia de Dios!.

Jesucristo rey del universo, un rey que gobierna no con la fuerza, no con la guerra ni la conquista, sino con el amor, la paz y con la misericordia.

Jesús acepta en su reino a aquellos que se presentan con esta actitud del buen ladrón. No retando a Dios, no comprando la salvación, sino alguien que ha descubierto su debilidad, ha descubierto su pecado, acercándose al señor con total sinceridad.

Este día se cierra la puerta santa, pero no se cierra la puerta de la misericordia.

Muchos dicen que ya no habrá misericordia, pues debes saber que la puerta por excelencia de la misericordia es la confesión, y ahí podemos acercarnos a nuestro rey .

Tal como lo hizo Dimas el buen ladrón: con humildad, con arrepentimiento, creyendo en esa salvación, creyendo en ese rey, cuando muchos lo niegan, lo insultan.

Que esa sea realmente nuestra actitud en el sacramento de la reconciliación, y en nuestra vida diaria. Creer en ese Jesús que es dueño de mi vida, que es rey del universo.

Si eres un hijo de un rey, no vivas como un esclavo, esclavo del pecado, esclavo de las pasiones, esclavo de los vicios, decídete a vivir realmente como un hijo de un verdadero rey.